Seguros en Cristo
Imaginemonos por un momento a un niño que nace en un hogar de escasos recursos, donde falta una de las figuras paternas y el ingreso del hogar apenas alcanza para comer.
Ahora imaginemos al mismo niño en un hogar de padres millonarios, capaz de costiar los gastos del niño hasta que termine todos sus estudios y adquiera su independencia.
¿ En cuál de los dos hogares estaría más seguro el niño en caso de sufrir una dificultad económica ?
Lógicamente que el segundo hogar le ofrece un mayor respaldo y seguridad al niño.
En momentos de dificultad económica, familiar, social o personal, no debemos olvidar quien es nuestro padre celestial y donde se encuentra nuestro hogar.
Siguiendo está misma idea leamos 1 de Pedro 1:3-5
"Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,
para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,
que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero."
para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,
que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero."
La situación de los Cristianos a los cuales el apóstol Pedro se dirije la epístola era crítica; ellos se encontraban bajo el imperio romano, que estaba gobernado por el emperador Nerón, un hombre malvado que había llegado al poder envenenando a su medio hermano y que ahora perseguía a los cristianos hasta matarlos, logrando incluso que el pueblo romano los odiara; pues Nerón los había culpado de un incendio que afectó la ciudad de Roma.
El apóstol Pedro escribe la epístola para animar a los cristianos y lo hace resaltando el sacrificio de Jesucristo.
En tal sentido quiero mencionar 4 razones para estar seguros en Cristo.
La primera Razón para estar seguro en Cristo es que:
1. Tenemos vida eterna
1 Pedro 1:3
"que según su grande misericordia nos hizo renacer"
"que según su grande misericordia nos hizo renacer"
La palabra "renacer" en otras versiones es cambiada por "nacer de nuevo" o "vida nueva"
Esta vida nueva es la prueba de que el hombre ha sido salvado por Dios y se manifiesta en una vida regenerada o transformada y un rechazo continuamente del pecado.
La vida nueva a diferencia de la vida vieja no se termina con la muerte. Jesús dijo:
Juan 11:25-26
"Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?"
Jesús les menciona esto a Marta y a María, quienes estaban muy angustiadas porque Lázaro había muerto y pensaba que era su fin, pero Jesús le demuestra lo contrario.
Para el ser humano que está sin Cristo la muerte representa una sentencia final, que lo llevará a pasar la eternidad sin Cristo o también conocida como la segunda muerte.
Mientras para los que estamos en Cristo la muerte es un paso para vivir eternamente con él.
La segunda razón para estar seguros en Cristo es que:
2. Tenemos una esperanza viva
1 Pedro 1:3
"para una esperanza viva"
1 Pedro 1:3
"para una esperanza viva"
El apóstol Pedro le recalca a los Cristianos que estaban bajo persecución de que su victoria no dependía de lo que hiciera el emperador Nerón; sino más bien del hecho consumado en la cruz por Cristo y que fue respaldado por su resurrección.
De manera de que nuestra victoria no depende de lo que ocurre o deje de ocurrir en el mundo, sino única y exclusivamente de lo que Cristo hizo en la cruz.
Estando completamente seguro de esto el apóstol Pablo mencionó:
Romanos 8:35-39
"¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. m
Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro."
"¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. m
Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro."
En una ocasión me tocó visitar a un hermano anciano que se encontraba enfermo; cuando llegué a su casa decidimos realizar un servicio todos los que estábamos presente, en el momento de cantar la primera alabanza para mi sorpresa el hermano enfermo se levantó rápidamente de su silla donde descansaba, para alabar a Dios con gran animo.
La esperanza que tenía este hombre lo impulsaba aún en su peor situación, porque su esperanza era Cristo el Señor.
Nuestra Victoria no depende de la situación del mundo, si es buena o mala; pues nuestra esperanza descansa única y exclusivamente en Cristo Jesús.
La tercera razón para estar seguro en Cristo es por:
3. Nuestra herencia celestial
1 Pedro 1:4
"para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros."
1 Pedro 1:4
"para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros."
Quizás los cristianos que estaban en ese tiempo estaban dudando de las promesas que el Señor les había hecho antes de ascender a los cielos, como la de encontrarnos con él en el cielo, por tal razón el apóstol habla de esa promesa como la herencia celestial y la describe como una herencia que no se pierde, que no cambia su forma y pureza con el tiempo o situaciones.
Al respecto dice Jesús:
Juan 14:1-3
"No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.
Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis."
"No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.
Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis."
No importa la situación que enfrentemos el propósito de Dios es que estemos con él por la eternidad en el cielo. Nada ni nadie podrá cambiarlo.
La cuarta razón para estar seguro en Cristo es porque:
4. El mismo nos cuida
1 Pedro 1:5
"que sois guardados por el poder de Dios"
"que sois guardados por el poder de Dios"
El apóstol Pedro concluye estos cinco versículos diciendo en otras palabras que estamos seguros en Cristo porque el mismo nos cuida, asegurándose de nosotros para preservarnos hasta el día del Señor.
El Salmo 23 registra la declaración de confianza de David al describir a Dios como su pastor. Leamos
"Jehová es mi pastor; nada me faltará.
En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará.
Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días."
En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará.
Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.
Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días."
R.C. Sproul dijo: " Estamos seguros, no porque nos aferramos fuertemente a Jesús, sino porque él nos sostiene fuertemente a nosotros"
Estamos seguros en Cristo, no por nuestros logros o esfuerzos, sino por los de él únicamente.
Quizás estés pasando por una situación difícil, alguna enfermedad, la muerte de un familiar, la pérdida de un empleo o alguna relación importante, haciendo que ahora mismo te sientas perturbado e inseguro con respecto a tu porvenir; quiero que tomes en cuenta este mensaje amigo lector y recuerdes la obra de Cristo que nos dá la victoria a todos los que estamos en él, sin importar como estén los tiempos, ¡ ya somos más que vencedores !
Tu También puedes ser parte de esa victoria y tomar la desicion de aceptar a Cristo como tu único y suficiente Salvador, viviendo en santidad, renunciando al pecado; sólo debes orar a él y decírselo tu mismo.
Dios te bendiga.
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