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Mostrando las entradas de 2021

El Hijo del Hombre

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  El Hijo del Hombre “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.” Lc.19:10 Introducción El título del Hijo del Hombre aparece en cada uno de los principales estratos de los evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Setenta veces en los sinópticos y unas diez veces en el evangelio de Juan. Siempre es una auto – designación de Jesús, excepto en el libro de Hechos 7:56. La mayor parte de los eruditos de hoy reconocen que el Hijo del Hombre fue un título empleado por Jesús para sí mismo. En tal sentido, quiero resaltar tres aspectos del Hijo del Hombre:      1.     Su comienzo “El Hijo del Hombre Vino”. Lc.19:10 Aunque no se conoce la fecha exacta del nacimiento de Jesús, no hay duda alguna de que vino al mundo ; por las siguientes evidencias:   -        Evidencias Bíblicas Los tres evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas)   hablan de la vida de Jesús, coincidiendo en muchos aspectos, aunque se escribieron por separado, corroboran

Vestíos de toda la armadura de Dios - Efesios 6:10-24

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“Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.” Ef. 6:11   Introducción Esta es la sección final de la epístola a los Efesios, en ella el apóstol Pablo hace uso de sus conocimientos en cuanto a la indumentaria de un soldado romano, exhortando a todos los creyentes de la iglesia de Éfeso y sus alrededores a vestirse con toda la armadura de Dios. Y  lo hace por las siguientes razones:   1.     La vida Cristiana es una guerra espiritual   Nota el lenguaje del apóstol Pablo al iniciar esta sección: “Fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza” Ef.6:10. En la versión N.T.V. dice “Sean fuertes en el señor y en su gran poder”.   Pablo hace uso de estas palabras para advertir a toda la iglesia de Éfeso que la vida Cristiana no es color de rosa, sino todo lo contrario; es una guerra espiritual, cuyo enemigo es el diablo. Ef. 6:11-12 Ef. 6:11-12 nos dice claramente que nuestra lucha no es contra carne y sangre, sino

LA UNIDAD DEL ESPÍRITU

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EFESIOS 4: 1-16 1    Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, 2  con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, 3  solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz; 4  un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; 5  un Señor, una fe, un bautismo, 6  un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos. 7  Pero a cada uno de nosotros fue dada la gracia conforme a la medida del don de Cristo. 8  Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres. 9  Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? 10  El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo. 11  Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas

SALVACIÓN POR GRACIA

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  EFESIOS 2:1-10 1  Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, 2  en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, 3  entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. 4  Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, 5  aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), 6  y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, 7  para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús. 8  Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros,