Pasos para afrontar un desafío
Un desafío es una situación compleja o difícil, que requiere de nuestra parte esfuerzo y destreza. En la Biblia podemos encontrar varios ejemplos de desafíos, para está ocasión estaré enfocandome en 2 Crónicas 2:1-5
"Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino.
Y designó Salomón setenta mil hombres que llevasen cargas, y ochenta mil hombres que cortasen en los montes, y tres mil seiscientos que los vigilasen.
Y envió a decir Salomón a Hiram rey de Tiro: Haz conmigo como hiciste con David mi padre, enviándole cedros para que edificara para sí casa en que morase.
He aquí, yo tengo que edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, para consagrársela, para quemar incienso aromático delante de él, y para la colocación continua de los panes de la proposición, y para holocaustos a mañana y tarde, en los días de reposo, nuevas lunas, y festividades de Jehová nuestro Dios; lo cual ha de ser perpetuo en Israel.
Y la casa que tengo que edificar, ha de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses."
Y designó Salomón setenta mil hombres que llevasen cargas, y ochenta mil hombres que cortasen en los montes, y tres mil seiscientos que los vigilasen.
Y envió a decir Salomón a Hiram rey de Tiro: Haz conmigo como hiciste con David mi padre, enviándole cedros para que edificara para sí casa en que morase.
He aquí, yo tengo que edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, para consagrársela, para quemar incienso aromático delante de él, y para la colocación continua de los panes de la proposición, y para holocaustos a mañana y tarde, en los días de reposo, nuevas lunas, y festividades de Jehová nuestro Dios; lo cual ha de ser perpetuo en Israel.
Y la casa que tengo que edificar, ha de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses."
El pasaje que leímos nos habla del rey Salomón, quien enfrentaba un gran desafío. El rey David había muerto, y su sucesor según la tradición debía ser su hijo mayor, pero no fue así; Salomón fue el sucesor de su padre David. La Biblia nos describe a Salomón de tierna edad y de poca experiencia. Además su padre le comisionó edificar el templo para Dios. Estos compromisos sin duda significaban un gran desafío para el joven Salomón.
Al igual que Salomón, cada uno de nosotros pudiera tener que enfrentar un desafío en su vida; lo importante es como lo enfrentes. Para ello quiero mencionar algunos pasos que me enseña la Biblia para enfrentar y superar un desafío.
El primer paso para afrontar un desafío es:
1. Buscar la ayuda de Dios (2 Crónicas 1:1-10)
"Salomón hijo de David fue afirmado en su reino, y Jehová su Dios estaba con él, y lo engrandeció sobremanera.
Y convocó Salomón a todo Israel, a jefes de millares y de centenas, a jueces, y a todos los príncipes de todo Israel, jefes de familias.
Y fue Salomón, y con él toda esta asamblea, al lugar alto que había en Gabaón; porque allí estaba el tabernáculo de reunión de Dios, que Moisés siervo de Jehová había hecho en el desierto.
Pero David había traído el arca de Dios de Quiriat-jearim al lugar que él le había preparado; porque él le había levantado una tienda en Jerusalén.
Asimismo el altar de bronce que había hecho Bezaleel hijo de Uri, hijo de Hur, estaba allí delante del tabernáculo de Jehová, al cual fue a consultar Salomón con aquella asamblea.
Subió, pues, Salomón allá delante de Jehová, al altar de bronce que estaba en el tabernáculo de reunión, y ofreció sobre él mil holocaustos.
Y aquella noche apareció Dios a Salomón y le dijo: Pídeme lo que quieras que yo te dé.
Y Salomón dijo a Dios: Tú has tenido con David mi padre gran misericordia, y a mí me has puesto por rey en lugar suyo.
Confírmese pues, ahora, oh Jehová Dios, tu palabra dada a David mi padre; porque tú me has puesto por rey sobre un pueblo numeroso como el polvo de la tierra.
Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?"
Y convocó Salomón a todo Israel, a jefes de millares y de centenas, a jueces, y a todos los príncipes de todo Israel, jefes de familias.
Y fue Salomón, y con él toda esta asamblea, al lugar alto que había en Gabaón; porque allí estaba el tabernáculo de reunión de Dios, que Moisés siervo de Jehová había hecho en el desierto.
Pero David había traído el arca de Dios de Quiriat-jearim al lugar que él le había preparado; porque él le había levantado una tienda en Jerusalén.
Asimismo el altar de bronce que había hecho Bezaleel hijo de Uri, hijo de Hur, estaba allí delante del tabernáculo de Jehová, al cual fue a consultar Salomón con aquella asamblea.
Subió, pues, Salomón allá delante de Jehová, al altar de bronce que estaba en el tabernáculo de reunión, y ofreció sobre él mil holocaustos.
Y aquella noche apareció Dios a Salomón y le dijo: Pídeme lo que quieras que yo te dé.
Y Salomón dijo a Dios: Tú has tenido con David mi padre gran misericordia, y a mí me has puesto por rey en lugar suyo.
Confírmese pues, ahora, oh Jehová Dios, tu palabra dada a David mi padre; porque tú me has puesto por rey sobre un pueblo numeroso como el polvo de la tierra.
Dame ahora sabiduría y ciencia, para presentarme delante de este pueblo; porque ¿quién podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?"
Salomón conocía sus limitaciones para gobernar, por eso lo primero que hizo al recibir el reinado de su padre fue buscar la ayuda y dirección de Dios.
Muchas veces no queremos reconocer nuestras limitaciones, pues pensamos que contamos con la fuerza y la inteligencia para hacer lo que sea; pero no es así. El hombre es pequeño y frágil, sus días están contados sobre la tierra. Por eso necesitamos de la ayuda de Dios, sin él nada podríamos hacer.
El segundo paso para afrontar un desafío es:
2. Determinar afrontar el desafío
2 Crónicas 2:1
"Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino."
"Determinó, pues, Salomón edificar casa al nombre de Jehová, y casa para su reino."
Luego de recibir la ayuda de Dios, Salomón decidió empezar la edificación del templo.
En el pasaje no vemos a un Salomón indeciso o inseguro, tampoco lo vemos esperando que otro venga y haga su trabajo; Salomón simplemente puso manos a la obra.
Hay personas que pasan sus días en una inseguridad, preguntándose si lo hacen o no; para luego terminar sin hacer nada.
Es importante decidir afrontar el desafío una ves que tenemos el respaldo de Dios, de lo contrario nunca haremos nada en relación a ese desafío.
Es importante decidir afrontar el desafío una ves que tenemos el respaldo de Dios, de lo contrario nunca haremos nada en relación a ese desafío.
El tercer paso para afrontar un desafío es:
3. Buscar la ayuda de personas con experiencia
2 Crónicas 2:3
"Y envió a decir Salomón a Hiram rey de Tiro: Haz conmigo como hiciste con David mi padre, enviándole cedros para que edificara para sí casa en que morase."
"Y envió a decir Salomón a Hiram rey de Tiro: Haz conmigo como hiciste con David mi padre, enviándole cedros para que edificara para sí casa en que morase."
Luego de que Salomón empezó a edificar el templo, se dio cuenta de que necesitaba de la ayuda de una persona con experiencia en el trabajo.
Es importante resaltar que Salomón no se quedó lamentándose porque no tuviera todos los materiales o la experiencia necesaria en el trabajo, él buscó ayuda para terminar con su tarea; dejando ver el interés que tenía por la obra.
Hay personas que prefieren lamentarse y renunciar en lugar de buscar ayuda. Para buscar la ayuda de otros necesitas interés en la tarea, sin él no podrás terminarla.
Un joven estaba en su primera clase de oratoria y el profesor les coloco una prueba que consistía en contar una anécdota al resto de los estudiantes; cuando le tocó el turno al joven los nervios lo atacaron y no pudo hacerlo, cuando el profesor le dijo que se sentará el joven insistió en querer hacerlo, el profesor al ver su interés le dio otra oportunidad y finalmente el estudiante hizo la prueba, logró hacerlo por su interés.
El cuarto paso para afrontar un desafío es:
4. Comprometerse con el desafío
2 Crónicas 2:4
"He aquí, yo tengo que edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, para consagrársela, para quemar incienso aromático delante de él, y para la colocación continua de los panes de la proposición, y para holocaustos a mañana y tarde, en los días de reposo, nuevas lunas, y festividades de Jehová nuestro Dios; lo cual ha de ser perpetuo en Israel."
"He aquí, yo tengo que edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, para consagrársela, para quemar incienso aromático delante de él, y para la colocación continua de los panes de la proposición, y para holocaustos a mañana y tarde, en los días de reposo, nuevas lunas, y festividades de Jehová nuestro Dios; lo cual ha de ser perpetuo en Israel."
La edificación del templo de Dios iba a beneficiar a todo el pueblo de Israel; sin embargo, sin embargo; Salomón no le dijo a Hiram; Isarael tiene que edificar el templo o los sacerdotes tienen que edificar el templo, ¡NO! El dijo: "yo tengo que edificar el templo a Jehová"; dejando ver su compromiso con la obra. Pero el estar comprometido no significa simplemente decir "yo", se trata de estar identificado con la causa, en este caso de Dios.
Salomón sabía que la edificación del templo promovía la adoración a Dios y por lo tanto el fortalecimiento de la fe de los Israelitas. El estaba comprometido con la causa de Dios, por ello explica el propósito del templo.
Para afrontar un desafío necesitas estar comprometido con él y su causa. De lo contrario lo que hagas no tendrá sentido.
El quinto y último paso para afrontar un desafío es
5. Querer hacerlo bien
2 Crónicas 2:5
"Y la casa que tengo que edificar, ha de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses."
"Y la casa que tengo que edificar, ha de ser grande; porque el Dios nuestro es grande sobre todos los dioses."
Salomón no quería hacer un templo por hacer, el quería hacer un magnífico templo pues era para Dios; por eso se propuso hacer un templo grande, hermoso y fuerte que durará muchas generaciones, pues decía que la adoración a Dios debía ser perpetua.
Históricamente el templo de Salomón era impresionante, al punto que muchos venían a verlo de otras tierras y admiraban a Salomón por ello.
Es triste ver a personas que hacen las cosas por hacer, y lo es aún más cuando lo hacen en la Iglesia; el hacerlo así no le agrada a Dios, como no agradó la ofrenda de Caín.
¿Qué harás ante un desafío?
Dios quiere que todo lo que hagamos sea para honrarlo a él.
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