Un misionero por excelencia

Es muy importante conocer algunos conceptos referentes al tema antes de entrar en profundidad, comenzaremos en primer lugar con:

1. Misionero:
Perteneciente o relativo a la misión. (Diccionario popular)

2. Misión:
Tiene el mismo sentido que envío. (Concordancia de la Biblia latinoamericana)

En tal sentido podemos concluir que un misionero, es "alguien que ha sido enviado para hacer  algo".


En la Biblia hay una diversidad de ejemplos o referencia de personas que fueron enviadas  para cumplir una tarea, misioneros.

Podemos del apostol Pablo, antes conocido como Saulo de Tarso; perseguidor de la Iglesia de Cristo, pero que luego de conocer a Jesús su vida cambió, hasta punto de darla al servicio de la obra de Cristo.

Otro ejemplo que podemos destacar es el joven Timoteo, compañero y colaborador de Pablo, que no escatimó su juventud para comprometerse con Jesús y su obra.

También podemos destacar el testimonio de Mateo, conocido como cobrador de impuesto, visto como pecador ante los judíos; pero que al igual que Pablo su vida cambió, al punto de dedicarla por completo a la obra de nuestro Señor Jesucristo.

Todos estos varones de Dios para poder cumplir con la misión; que les fue encomendada de lo alto, tuvieron que seguir el ejemplo de un "Misionero por excelencia."

El apóstol Juan lo menciona en Juan 1:1 de la siguiente manera:

"En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios." 

La palabra verbo es usada en este pasaje para traducir la palabra griega "Logos" que significa "palabra". Para los judios la palabra tenia poder, pues representaba la palabra de Dios o también conocida Tenak o Biblia Hebrea.

La promesa de un "Misionero por excelencia" era conocida desde el principio y tenía su referencia en la Biblia la palabra de Dios.

Esa promesa se hizo carne y hábito entre los hombres, semejante acontecimiento se encuentra registrada en el Evangelio de Juan 1:14.

"Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad."

El misionero por excelencia es Jesús, él  vino al mundo para cumplir una misión, y la cumplió de manera extraordinaria. Por ello es importante destacar algunas características de él como misionero por excelencia.

1. Capacitó a sus discípulos: (Mateo 9: 35-37)

"Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.
 Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.
 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos."

Según el contexto Jesús había recorrido muchas ciudades y aldeas predicando el Evangelio y sábado enfermos; y se dio cuenta que había muchos necesitados del evangelio y le dijo a sus seguidores: " la mies es mucha y los obreros pocos". La Mies representa el tiempo de la siega o tiempo de recoger la cosecha.

No estamos en el tiempo de asistir a una Iglesia simplemente para cumplir un protocolo religioso. Jesús enfatizó la nesecidad de trabajar pronto en la obra, para ellos debemos preparnos y así poder preparar a otros.

Un misionero debe estar consciente de está necesidad que continúa latente y que es nuestra responsabilidad el capacitar discípulos.

2. No perdió el enfoque: ( Mateo 16:21-23)

"Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.
Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca.
Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: !!Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres."

Jesús les declaraba a sus discípulos que le era necesario padecer en Jerusalén delante de los ancianos y principales sacerdotes, escribas, para morir y resucitar al tercer día.

Pedro le tomó aparte para decirle que se compadesca  de si mismo para que ningún mal le acontesca. Pero Jesús le reprende   diciendo que pone la mira en las cosas del diablo y no en las de Dios, explicándole que es mejor perderlo todo por causa del evangelio a ganarlo todo y no tener la salvación.

Las cosas de este mundo son temporales y vanas, no hay que perder el enfoque de nuestro propósito como cristiano y redimidos del Señor; el cual es cumplir la gran comisión.

3. Su comunión con el padre: (Marcos 14:35-36)

"Yéndose un poco adelante, se postró en tierra, y oró que si fuese posible, pasase de él aquella hora.
Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti; aparta de mí esta copa; mas no lo que yo quiero, sino lo que tú."

Jesús se fue al monte de los olivos para orar, y escogió a Pedro, Jacobo, y Juan, quienes no pudieron mantenerse despierto; Jesús siguió orando aún sabiendo que le esperaba su muerte, él  oraba para que se hiciera la voluntad de Dios y no la de él.

Su relación con el padre, aún en los momentos más difíciles de su vida fue lo que le dio la fuerza para cumplir su misión como misionero.

Como cristianos misioneros debemos mantener una relación con el padre en todo momento, porque es esa comunión la que nos dará la fortaleza para cumplir nuestra misión sin importar la situación.

4. Cumplió su misión: (Marcos 14:50)

"Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron."

Judas, uno de sus discípulos le entregó, y vinieron a buscarle para castigarlo y enjuciarle para luego matarle. El resto de sus discípulos lo abandonaron, pero el término su misión con éxito a pesar de ello.


La situación de Jesús era cuesta arriba, todos le abandonaron pero sin embargo el cumplió con su misión.

Nosotros somos responsable de cumplir con la gran Comisión, todos en tal sentido somos misioneros y no podemos cumplir  nuestra misión sino seguimos el ejemplo del misionero por excelencia, Cristo.

DIOS TE BENDIGA.

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