El trabajo, la herramienta y el resultado del creyente. Filipenses 2:12-18

 



“Ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor” Fil. 2:12



 

INTRODUCCIÓN

Luego de que el apóstol Pablo presentara a Cristo como modelo absoluto para el creyente en la sección anterior, resaltando su autohumillación y su exaltación; ahora en este pasaje le ordena a la iglesia enfocarse en tres (3) aspectos de la vida cristiana.

 

1.    EL TRABAJO DEL CREYENTE  “Ocupaos en vuestra salvación” Fil.2:12

 

El apóstol Pablo ordena a la congregación de Filipos ocuparse en su salvación, resaltando en ellos la obediencia que ha visto, pero sobre todo que espera que mantengan más que nunca ahora en su ausencia.

 

Asimismo enseña tres (3) razones para hacerlo. La iglesia debe ocuparse en su salvación porque:

 

-       La Salvación es una obra progresiva:

La idea del texto original al decir “ocupaos en vuestra salvación” es que todos los creyentes deben procurar el desarrollo pleno de su salvación, mediante una vida en el Espíritu Santo.

 

Esto es entendible cuando leemos Filipenses 1:6 “el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”; concluyendo de esta manera, que la salvación tiene un inicio, un desarrollo y un final; donde el creyente es responsable de su desarrollo en la medida de su obediencia al Señor. Haciéndolo con “temor y temblor”, es decir, reverencia y respeto.

 

-       Es el deseo de Dios:  

“Porque  Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer” Fil.2:13

El apóstol Pablo enseña que aunque él esté ausente, la iglesia no puede detenerse o distraerse de sus compromisos espirituales, porque Dios está presente, obrando en sus vidas; produciendo “el querer como el hacer, por su buena voluntad” para que completen plenamente su salvación.

Dicho de otra manera, una iglesia con un buen maestro pero sin Dios poco puede hacer; pero una iglesia con Dios puede cumplir con toda su obra.

 

-       Nos distingue como hijos de Dios

“Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles  y sencillos, hijos de Dios” Fil.2:14-15

 

El Apóstol Pablo, exhorta a ocuparse de la salvación de la forma correcta, esto es sin murmuraciones y contiendas. Lamentablemente, algunos miembros de la iglesia hacían las cosas buenas de forma incorrecta; por orgullo y por conflicto, creando divisiones entre ellos.

 

El propósito del apóstol al escribir esta  epístola es que la iglesia pueda estar en unidad, sintiendo una misma cosa y dejando a un lado el orgullo y los conflictos porque esto les distingue como hijos de Dios en un mundo oscuro.

 

 

2.    LA HERRAMIENTA DEL CREYENTE  asidos de la palabra de vida” Fil.2:16-17

 

La palabra asidos significa agarrar y tomar. Dicho de otra manera, no suelten la palabra de Dios, porque ella es todo lo que necesitan para  completar su salvación.

 

El apóstol Pablo enseña que en la medida de que los creyentes de Filipos se aferren a la palabra de Dios, aplicando sus enseñanzas a sus vidas, más posibilidades tiene de que su trabajo misionero en ellos sea un éxito.

 

Es decir, el éxito ministerial depende mayormente de la obra de la Palabra de Dios en el creyente y no tanto de los esfuerzos humanos del ministro cristiano. Esto, asegura el apóstol que es la mayor recompensa que puede recibir, y que tiene incluso más valor que su propia vida; la cual está dispuesta a sacrificar por la causa del Señor.  

 

3.    EL RESULTADO DEL CREYENTE “Y asimismo gozaos y regocijaos”. Fil. 2:18

 

Filipenses es también conocida como la epístola del gozo, en ella se aprecia de manera constante las exhortaciones del apóstol hacia la iglesia para que estén gozosos al igual que él. (Fil. 2:2; 2:28,29; 4:4)

 

La razón de la felicidad del apóstol Pablo era la seguridad de su salvación, aquella le permitía estar confiado en cualquier situación y le proporcionaba razones suficientes para contentarse.

 

Por ello, el rey David en medio de su dolor y amargura por causa de su pecado le pide a Dios lo siguiente: “Vuélveme el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente”  Sal. 51:12

 

El resultado de una persona que ha sido salvada es el gozo, porque ha entendido que pase lo que pase, su vida no está limitada a este mundo; sino que transciende hasta le presencia de su Salvador por la eternidad.

 

 

CONCLUSIÓN

 

El galardón menos merecido para el creyente es su salvación, por ella vivimos en este mundo con nuestra mirada hacia el cielo y no en los placeres temporales del pecado, atesorando la Palabra de vida mientras esperamos a nuestro buen Salvador.

 

 

 

 

 

  

 

 

 


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