EL EVANGELIO// Romanos 1:16
“Porque
no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo
aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.” Ro. 1:16
Introducción
Dos de las razones por las
cuales el apóstol Pablo escribe esta epístola es: 1) Darse a conocer a los
creyentes de Roma, pues tenía intensiones de visitarlos; y 2) Desarrollar y defender
la verdad del evangelio (buenas nuevas de salvación)
En este versículo 16 el
apóstol resalta 4 verdades importantes acerca del evangelio:
1.
El Evangelio no avergüenza: “no
me avergüenzo del evangelio”
Roma
era conocida como el centro del mundo, eje económico, político, un imperio;
lleno de gran lujo y no afectos al cristianismo. Además de esto, se cree que había
un millón de personas, de los cuales 30 mil eran judíos aproximadamente, estos
veían al evangelio como tropiezo, y por otra parte; para los gentiles era
insensatez (locura).
Por
esta razón, Pablo sabía que se necesitaba coraje para anunciar el evangelio en
Roma, sin embargo; él menosprecio cualquier indicio de vergüenza a cambio de la
gloria presente en la buena noticia de salvación para un mundo moribundo, por
eso el mismo declara “no
me avergüenzo del evangelio”
2. El evangelio es poder de Dios: “es
poder de Dios”
En
griego hay cuatro sinónimos para poder:
Exousia (autoridad delegada), Ischuros (fuerza física), Kratos (dominio) y la
palabra Dunamis que indica el poder
divino, milagroso, y sobrenatural.
En Hechos 4:33 se refiere a esta palabra “Y con gran poder (dunamis) los apóstoles daban testimonio de la resurrección del
Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos.”
El apóstol Pablo utiliza la misma
palabra “Dunamis” para decir que el
evangelio es poder de Dios, no para destruir sino construir.
3. El evangelio salva: “para
salvación”
En esta epístola Pablo reconoce la
condición de pecado tanto de judíos como de gentiles, estando ambos en una
misma condición, y al mismo tiempo enseña el fracaso de la ley como método de
salvación, dejándolos de esta manera en un estado de condenación de el cual
necesita ser liberado.
Por
encima de esta verdad, el apóstol resalta que el evangelio ha sido diseñado
para salvar (liberar) a todos los pueblos de dicho estado, dejando ver su
eficacia.
Además,
esta eficacia se evidencia de manera especial en la vida de una persona,
transformando y renovando su ser de forma milagrosa, el mismo apóstol Pablo
posee un testimonio, de ser perseguidor de la iglesia ahora defensor y
predicador del evangelio.
4.
El Evangelio se cree: “a todo aquel que cree”
La
idea en el idioma original es “confiar en el evangelio” no es suficiente con
escuchar el evangelio, es necesario confiar en él para salvación.
Es
importante que aquellos que ya han creído al evangelio ahora lo prediquen para
que otros crean también.
“¿Cómo,
pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de
quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique?
¿Y
cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son
los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!.”
Rom. 10:14-15
Conclusión
El evangelio es el mensaje más
importante no solo para la iglesia sino también para el mundo, se trata del
poder de Dios derramado al mundo en la persona de Cristo.
Nuestra responsabilidad no termina
cuando creemos en ese mensaje, nosotros como iglesia somos responsables de
anunciar ese mismo mensaje a otros para que puedan creer en Cristo.
Comentarios
Publicar un comentario