NO OS AFANÉIS Mateo 6:25

 

NO OS AFANÉIS

“Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?” Mateo 6:25

 

 

INTRODUCCIÓN

La palabra “Afán” según el diccionario popular, se refiere  a un anhelo vehemente, o esfuerzo e interés en conseguir una cosa. En el idioma original (griego) se trata de ansiedad, preocupación y cuidado.

Por lo general las personas se afanan o preocupan al punto de trabajan excesivamente por conseguir comida “de comer o qué habéis de beber” Mt.6:25; ropa “qué habéis de vestir” Mt.6:25; y dinero (Lucas 12:13-21) curiosamente un pasaje que se encuentra en el contexto del pasaje paralelo de Mateo 6:25-34, es decir Lucas 12:22-31, el cual nos habla acerca de un rico afanado por acumular bienes para el futuro.

En Lucas 10:38-42, Jesús condena el afán que tenía Marta por los quehaceres de su casa y alaba a su hermana María quien escogió la mejor parte, estar a los pies del Señor.  

Muchos de nosotros de igual forma nos afanamos por todas estas cosas, pero Jesús dice en su palabra que no lo hagamos (Mateo 6:25; 31). Quiero enseñar a continuación las razones por la cuales no tenemos que caer en el afán según la Biblia y luego lo que debemos hacer en lugar de afanarnos.

 

RAZONES PARA NO AFANARNOS

Dios cuida de nosotros

“Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?” Mateo 6:26; Lucas 12:24

Jesús hace una comparación en este pasaje con las aves, en Lucas 12:24 se menciona a los cuervos que no siembran, ni recogen, mucho menos tienen una despensa o un granero pero aún así siempre tienen que comer porque Dios cuida de ellos.

Luego termina con una pregunta que no necesita respuesta porque ciertamente somos más valiosos que las aves por tanto Dios cuida de nosotros en mayor medida que a las aves.

Salmos 121:3  No dará tu pie al resbaladero, Ni se dormirá el que te guarda. (Hablando de la protección de sobre Israel)

Salmos 23:1 Jehová es mi pastor; nada me faltará. (Habla de los cuidados de Dios para con David)

 

El Afán no es provechoso

¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo? Mateo 6:27; Lucas 12:25

Jesús nuevamente hace una pregunta cuya respuesta es obvia, nadie puede aumentar su estatura por más que se afane, porque el afán no es provechoso.

Por el contrario, según medlineplus, una página de internet que se centra en temas de salud; el afán tiene efectos negativos en la salud: Presión arterial alta, insuficiencia cardíaca, diabetes, obesidad, depresión o ansiedad.

El afanarse no es bueno para nosotros, afecta nuestra salud pero también nuestra vida espiritual: en Lucas 10:38-42, vemos que Marta se perdió de escuchar la palabra de Jesús y de estar a sus pies como su hermana María, por estar afanada. El afán es un obstáculo para acercarnos a Dios y confiar en su palabra. 

 

El afán no es una conducta cristiana  

“Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.” Mateo 6:32

En Lucas 12:30  se menciona que quienes se afanan son las personas del mundo.

Tanto los gentiles como las personas del mundo representan aquellos que no conocen a Dios y no viven a su manera, sino siguiendo los deleites temporales del mundo. 

El afán es un esfuerzo propio por lograr las cosas en lugar de esperar y confiar en Dios. Abraham y Sara se apresuraron en tener un hijo, luego de ver que la promesa de Dios no se cumplía en el tiempo que ellos esperaban y por eso tuvieron  Ismael (Génesis 16-18), hijo que no tuvo los mismos derechos que Isaac el  verdadero hijo de la promesa.

El afán nos hace actuar a nuestra manera y no a la de Dios.

 

QUÉ HACER EN LUGAR DE AFANARNOS 

Buscar el reino de Dios

“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.” Mateo 6:33; Lucas 12:32

El buscar el reino de Dios y su Justicia es lo más importante en la vida de un cristiano, nada merece más nuestra atención que Dios y su reino, por eso debe ser una prioridad en nuestras vidas.  

Todas las demás cosas serán añadidas de acuerdo al propósito de Dios para con nosotros en su tiempo y a su manera. Él no quiere que invirtamos todo nuestro esfuerzo y tiempo en conseguir estas cosas como las personas del mundo, ¡Él las añadirá de acuerdo propósito!

 

Orar

“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” Filipenses 4:6

El apóstol Pablo plantea un camino mejor en lugar del afán, la oración.

La oración nos enseña a esperar y confiar en lo que Dios puede hacer en lugar de enfocarnos en lo que no podemos cambiar. “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios”

La oración nos tranquiliza y nos da paz “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.” Filipenses 4:7

 

CONCLUSIÓN

El afán es la consecuencia de no conocer y confiar en Dios. Una manera de evitar y derrotar el afán en nuestra vida es buscando más de Dios y su reino, orando antes que preocuparnos por los problemas o las cosas que no tenemos. Esto traerá paz a nuestra vida a pesar de las circunstancia.